¿Qué es contenido viral y por qué es peligroso?

El "contenido viral" es el que se expande por las redes sociales en Internet y resulta con un gran número de visualizaciones, comparticiones, y referencias. Profesionales y amataurs, pequeñas empresas y grandes todo el mundo quiere que su contenido obtenga la categoría de viral.

Sobra decir que su nombre viene haciendo una similitud con los virus, que se propagan entre las personas, o en las plantas según su naturaleza; y lo hacen a gran velocidad.

Producir un contenido requiere esfuerzo. Algunos contenidos en vídeo requieren meses de preparación, decenas de ensayos, y postproducción con lo que resultan muy caros. No obstante, la recompensa podría ser elevada con el reconocimiento por ejemplo.

Inversión vs. recompensa

No parece existir una relación muy directa. Algunas grandes inversiones en esfuerzo y dinero pueden acabar en poco o nada, y otras con una inversión casi nula pueden encontrar la magia para propagarse y convertir el contenido en viral. 

Lo que sí es cierto es que más que del contenido, se depende del público. Por ejemplo, los asesinos de personas famosas se hacen virales, porque generan una gran repercusión, todo el mundo quiere saber quién es, sus motivaciones, por qué lo hizo. No obstante un asesinato a una persona anónima suele tener cero cobertura. El ejemplo podría parecer muy inapropiado, aunque es real. El hecho es que las personas consumen principalmente "morbo", ocio, desgracias, y enfado. 

No es necesario hacer un estudio muy exaustivo para saber qué es lo que más se consume en la televisión. Predominan los informativos, los debates con tertulianos excéntricos, los programas que muestran las desgracias de famosos, y por suerte, también el humor. 

Todo el mundo sabe que lo que menos se consume es educación, documentales, e historia. De ahí que una explicación matemática o física es fácil de vaticinar que tendrá un futuro muy reducido o ninguno, sin embargo, contar una desgracia ocurrida a un famoso tendrá mucho público. 

Ganar con lo negativo

No estaría mal echar un vistazo a nuestros propios valores éticos para al menos, consumir contenido de forma conciente, o crear contenido con propósito. 

También debería existir un debate en qué tan ético es vivir de contar la vida de otras personas, ganarse la vida contando las desgracias de famosos, u obtener dinero a cambio de perseguir y grabar desgracias. Pero cierto es que hoy es lícito, y cierto es que hoy es lo que más se ve. 

¿Por qué es peligroso el contenido viral?

De todos es sabido que los actores, deportistas, y celebridades suelen ocultarse de quienes les persiguen para fotografiarles, para descubrir algún trapo sucio que contar, o incluso tratar de ser el primero en generar una posible noticia.

Los siguientes son ejemplos de repercusiones que han venido sobre personas famosas o sobre los mismos creadores de contenido: 

1. Diana de Gales murió en 1997 huyendo de paparazzis que la perseguían para obtener una fotografía con su novio Dodi Fayed. 
2. En 2013 un paparazzi fue atropellado y murió en la calle mientras fotografiaba el Ferrari de Justin Bieber. Aunque Bieber no estaba conduciendo el coche en ese momento, la tragedia ocurrió debido a que el fotógrafo intentaba conseguir una imagen del vehículo. 
3. Shakira ha manifestado públicamente el acoso invasivo que sufren sus hijos en España, pidiendo a los medios que respeten su derecho a una vida normal lejos de las cámaras.

En los inicios de siglo los creadores de contenido estaban muy profesionalizados porque solo esra posible publicar contenido en los medios de comunicación tradicionales, es decir, en televisión y prensa principalmente (la radio no solía ser creadora su rol era más de difusión). Con la llegada de Internet más personas, y con las redes sociales una infinidad de personas intentan no solo crear contenido, también ganarse la vida. 

Es cada vez más difícil engancharse en este negocio porque ya hay demasiados, y en cuanto a alguno le funciona un método, tiene miles de personas replicando el modelo, o al menos intentándolo. 

Escalada para competir

Imagine que hay una carrera en la que ya han salido los vehículos, qué puede hacer alguien para usar un coche similar y alcanzarles. No hay soluciones fáciles sin usar aceleradores, por ejemplo propulsarse con un combustible más explosivo, que te "arrastre" un avión, lanzarse desde una rampa... Como puede ver, es necesario una solución "explosiva".

La misma situación se da con los creadores de contenido, quienes parecen nacer con la palabra "influencers" y buscan el like y el contenido viral que les ponga en la carrera. Las únicas fórmulas posibles requieren de absolutas locuras para poder conseguirlo, los llamados "challenge", o extremos. Ecisten en su propio lenguaje, al menos cuatro modalidades:

1. Stunt Viral (o simplemente "Stunt"): este es el término es técnico y neutro. Un stunt es una acrobacia, proeza o truco publicitario. En el contexto de redes, se refiere a cualquier acción extrema, elaborada o peligrosa que se organiza con el único fin de ser grabada y difundida masivamente para generar notoriedad. 
   
   
2. Clout Chasing (Búsqueda de Fama/Atención): describe la motivación detrás de estas acciones. Un clout chaser es alguien que persigue la fama, la visibilidad y el estatus social (de ahí el "clout") a toda costa, a menudo realizando actos que rozan lo inapropiado, ilegal o peligroso, solo para obtener una reacción masiva y viralidad. 
   
   
3. Retos Virales Peligrosos (Viral Challenges): cuando estas acciones se convierten en una tendencia replicable y otros usuarios las imitan, se les llama retos o challenges. Algunos ejemplos tristemente célebres han sido el Tide Pod Challenge (comer cápsulas de detergente) o el Benadryl Challenge (ingerir grandes dosis de antihistamínicos), que han provocado graves daños a la salud. El episodio piloto de Alerta La Serie trata este asunto, donde un joven solo ve la opción de hacer un challenge para poder "ganarse" una posición social en las redes sociales. 
   
   
4. Content House Stunts: se trata en forma específica a las payasadas extremas realizadas por grupos de influencers que viven juntos (en una Content House) y colaboran para mantener un flujo constante de contenido exagerado, a menudo involucrando destrucción de propiedad, bromas pesadas peligrosas o conflictos teatrales.

Ejemplo el caso del creador de contenido Kelton D en Japón

Kelton D es un creador de contenido español poco original que ha saltado a la fama de mala manera en Japón. 

Kelton D usa todos los trucos posibles. Viste con un sombrero que no encaja en los sitios a los que visita, viste mal, de una forma que se asegura incomodar a las personas. Levanta la voz, se hace el fuerte, usa un lenguaje forzadamente malo.

Ha sido noticia porque está replicando actividades que han iniciado otros creadores de contenido que consiste en ir a un país y sobrevivir unas cuantas semanas con poco dinero o con nada. En su caso se ha propuesto hacerlo solo con cien dólares, lo que le lleva a dormir en las calles, desde luego le sumará olores particulares, y además para crea contenido se obsesiona molestando a otras personas. 

No parece un buen plan para ganarse la vida, cualquiera le preguntaría a este joven qué espera hacer dentro de diez o veinte años. Mi propia suposición es que espera encontrar en algún momento un efecto de suerte que le haga ganar un millón y poder pagarse una vida decente. El hecho de que algunos "streamers" se conozca que alcanzan el millón de euros en ingresos, le hace pensar a muchos más que ellos también pueden, y quizá alguno lo consiga. 

El joven Kelton D lleva más de dos años produciendo contenido de forma constante y esforzándose al máximo para encontrar un hueco. Yo no le conozco de nada, por lo que mi propia deducción son solo suposiciones. Kelton D no ha conseguido una posición. En las redes populares como Instagram no han alcanzado ni los diez mil seguidores, y en el caso de Twitch apenas ha superado los 1.500 seguidores, una cantidad similar en TikTok. Para ser un streamer eso es equivalente a nada, de ahí que necesite subir el tono y posicionarse en el clout chasing. 

El pasado 25 de septiembre Kelton D subió a un tren en Japón, se sentó en un asiento reservado para personas mayores, discapacidad, o embarazadas, y empezó a hacer un directo a gran volumen. Previo a esto había molestado a una joven mujer en la estación, quien se vió forzada a fingir que viajaba con un hombre que estaba ahí para "quitarse" de encima al molesto streamer. El caso es que una persona mayor ha ido a hablar con él y éste le ha empujado dos veces, haciéndole perder el equilibrio. Este es el acto violento que consigue la viralidad. Abajo en este post puede observarse el vídeo.

Como consecuencia, Kelton D ha sido cancelado. Las redes sociales le han cerrado o suspendido sus cuentas por infringir sus políticas, las cuales básicamente consisten en cancelar la cuenta si otros usuarios descubren o reportan sus actividades inapropiadas. Kelton D ahora ha pedido los años que ha trabajado creando sus cuentas, y también ha perdido la posibilidad para continuar en este mercado. Peor aún, necesitará buscarse una nueva forma para "ganarse" la vida, pero partiendo de una fama en extremo negativa. 

Una situación parecida vivió Natalie Reynolds con TikTok, ella se hizo famosa cuando le cancelaron la cuenta y fue a una oficina de TikTok gritando "es mi vida", ya que había hecho toda la apuesta profesional basada en una red social. Puede ver más información de este caso en este enlace: https://www.marlonmolina.com/2025/06/cual-es-la-realidad-de-los-negocios-en.html.